👣 Constantemente, y sin darnos cuenta, compartimos información por Internet: cuando realizamos una compra online, buscando respuestas por los navegadores o publicando en las redes sociales, por ejemplo. Este rastro que dejamos es lo que se denomina huella digital.
✌️ Las hay activas y pasivas. Las primeras tienen lugar cuando compartimos nuestra información de forma voluntaria, mientras que las pasivas están relacionadas con la recopilación de datos sin el conocimiento del usuario.
⚠️ Si los ciberdelincuentes consiguen acceder a información privada y comprometida se pueden generar consecuencias graves como estafas o usurpación de identidad. Para proteger la privacidad, algunas personas han decidido proteger su huella digital en Internet para reducirla al máximo, y se puede conseguir siguiendo una serie de recomendaciones:
🔹 Descubrir mediante los motores de búsqueda cuales de nuestros datos están disponibles en Internet, para así tratar de eliminarlos, si es necesario.
🔹 Desactivar las cookies de terceros, para evitar que sigan nuestra actividad.
🔹 Vigilar con las redes sociales, preveyendo como afectará a nuestra huella digital lo que publiquemos.
🔹 Utilizar diferentes navegadores para evitar que toda la información personal se concentre en un perfil.
🔹 Crear contraseñas seguras y cambiarlas regularmente.
🔹 Reducir el número de aplicaciones en el teléfono móvil. Muchas de ellas exigen datoes, registran la ubicación y recopilan información.
✔️ Si os interesa saber más, os dejamos el enlace al artículo publicado en La Vanguardia.